sábado, 22 de noviembre de 2008

Nearly the end

De tanto ardor, podíase palpar lo ígneo, entre las trizas de aquel relato que no vislumbraba el final. Lamía los pies el inagotable ocaso, mirada agonizante aunque nunca pétrea, siempre sangrante.
Desgarraré el hábito y sus falsos bordados, opresor de un cuerpo inmóvil y ya putrefacto; otro tejeré, ahí donde, rasgando las fronteras de lo palpable, limitadas señales se expanden en cuerpos.
Aún no pentera mi voz en la inmensidad; aún no rozan mis pies el universo especular.

jueves, 20 de noviembre de 2008

Distancia

Siempre me transtornó el mundo exterior, clavándome no sé qué agujas de éxtasis terrenal que me hacían carcajearme como una posesa y zarandear al primero que pasara...
Tan distante figura de la que se perfila solitaria en su calma, permaneciendo unos instantes para desvanecerse como una quimera soñada.
Ambas nos miramos, en la distancia. Imposible comprensión. Tan sólo sueña que algún día saldrás de éste...

miércoles, 5 de noviembre de 2008

¿Y si suprimiera la escritura de mi vida?

La angustia existencial, el frío devenir automatizado de actos ya sin motivo; seré una figura vacua y quebradiza, desprendiéndome de cada uno de mis días, absurd...

Un momento: ¿y si suprimo el "yo"?

Para resquebrajar la angustia de los prolongados contrarios, moldear aquellas sentencias de inmovilidad instantánea pero eterna en mi anhelo que se aniquilan para no volver a existir sino como un ente vago, aunque más fuerte que el anterior.

Se me escapa de los dedos, no ya como un firme deseo, sino como mi propia indignidad. Nadie mi concedió autoridad para manchar su nombre y yo, a escondidas, tan sólo hago piruetas de mimo frustrado.

Más allá de la falacia que nombramos al pronunciar "vida", tan sólo una intermitencia que se apaga alimentando el desasosiego.

lunes, 3 de noviembre de 2008

Cierto misticismo

ya agonizando de tantos motivos que se desvanecen. Puede culparse al espejo quebradizo y a las biografías impuras. Podría también desesperarme y hallar en su oposición una respuesta trascendente.

Primer mandamiento: no teorizar sobre lo que no constituye una práctica... Primer mandamiento: no teorizar.

domingo, 2 de noviembre de 2008

El gran día...

... en el que tus heridas visten otro cuerpo y vierten otra voz. Te ves, esparcida en otros relatos. Te reconoces en esos llantos absurdos que te han robado encrucijadas; absorbiendo con derechos autoproclamados, esperando y exigiendo un brazo protector.

No hay peor egoísmo que el del victimismo; no hay peor obra que la compasión.

Coqueteé con las pasiones, revistiendo con su corteza mi aburrida cotidianeidad; cuando aborrecí esta artificiosa existencia, decidí adentrarme en ellas, sin escudo ni previsión. Necesidad de experimentación: los límites empiezan donde la vida se extingue.

Liberada por el sinsentido, la perpetua espiral de vocablos que, en eco, se sucedían se resquebraja, pulveerizándose. Y, ante mí, la realidad, nueva y apetecible, como una mañana sin pasado ni callejuelas estrechas.

No hay mejor atributo que la propia e incesante reconstrucción.